Todos los años, durante los meses de julio y agosto es posible disfrutar de una de las lluvias de estrellas más conocidas, las Perséidas. Denominadas popularmente “lágrimas de San Lorenzo”, suelen tener su máxima actividad en torno al 11 de agosto. Esta lluvia de estrellas ocurre cuando la Tierra atraviesa una nube de polvo estelar, originado por el paso del cometa Swift-Tuttle, que cada 133 años nos visita dejando un rastro de “escombros” en medio de la órbita terrestre.

Este año será especialmente favorable para disfrutar de este fenómeno natural, ya que su máxima actividad será la madrugada del 12 al 13 de agosto coincidiendo con la luna nueva. Si queréis disfrutarla, no tenéis más que buscar un lugar con poca contaminación lumínica y comprobar en la predicción del tiempo que el cielo vaya a estar despejado. Una buena hora para verlas será entre la una y las tres de la madrugada. Si tenéis suerte, podréis llegar a ver máximos de hasta 120 estrellas fugaces por hora.

En este enlace podeis consultar un detallado mapa de contaminación lumínica con el que localizar los lugares más “oscuros” de España. Como recomendación, os dejamos uno de nuestros lugares favoritos para observar el cielo nocturno, la Reserva de la Biosfera de Babia, aunque este año parece que las nubes no van a dar tregua y será complicado disfrutar de sus cielos estrellados.